¡Sí!
Tú y yo sabíamos que iba a escribir este post.
Recién pasada la medianoche del 2005 al 2006 se inició una batallan mental que invocó energías que están más allá de la comprensión humana. Justo en el instante en el que veía cómo el guapo y elegante presentador de Canal 21 (de Granada) felicitaba el año a sus espectadores, la habitación comenzó a cargarse de estática, las burbujas de mi copa de sidra emitían radiación cherenkov y ectoplasmas con formas terroríficas apenas sugeridas brillaban en la atmósfera.
Si estuviste muy atento al reloj, seguramente pudiste apreciar pequeños arcos voltaicos en los extemos de las agujas.
Fué una batalla terrible pero, al fín, logré que el reloj marchara con el paso firme disciplinado de un guardia de la plaza roja.
O, dicho con menos literatura, que el reloj de la Puerta del sol no se paró.
De modo que puedo reclamar los laureles del vencedor y cantar victoria.
En serio: ¿Alguien pesaba que todo esto tenía el menor sentido?
Como se vé en la noticia de arriba, Carlos Santillana no ha supuesto, ni por un momento, que su fallo se deba a un oponente psiónico más poderoso (con seguridad, ni siquiera sabe de mi papel paranormal). Razonablemente, él supone lo que para considera más probable: El reloj fué manipulado.
Estoy de acuerdo con Santillana: Es mucho más razonable suponer un reloj manipulado que alguna causa paranormal.
Porque todo el mundo sabe (y es demostrable) que los relojes se pueden manipular. Pero, sin embargo, nadie ha podido jamás demostrar meridianamente la existencia de los pretendidos poderes mentales.
Es improbable que el reloj esté manipulado, es cierto. Pero es mucho más improblable que haya sido yo con mi mente el que le ha fastidiado la escena a Santillana.
Pero esto nos lleva a la siguiente consecuencia lógica. Existe una opción mucho más razonable: La de que la improblable manipulación no ha sido necesaria, porque la aún más improblable influencia mental de Carlos Santillana tampoco ha existido.
Pero, imaginemos un escenario paralelo, en el que el reloj se hubiese detenido. ¿Qué explicación le daríamos? ¿Qué hipótesis, de entre los ejemplos siguientes, te parece más razonable?
Veamoslas una a una:
Casualidad: Cierto, si el reloj, por casualidad, se detuviese en el momento y modo en q ue dijo Santillana, sería una casualidad realmente sorprendente. Casi increíble. Pero nota que las casualidades existen, y que nos topamos con ellas día a día.
Sabotaje: Con cuatro relojeros vigilando, y el despliege de seguridad que sin duda acompañaría al evento, es realmente difícil que alguien saboetease ese reloj. Pero sabemos que los sabotajes son posibles. Hay precedentes de sabotajes y, aunque improbable, el sabotaje es concebible.
Relojeros sobornados: Si el sabotaje es improbable, quizás Santillana habría sobormado a los relojeros. Tengo la convicción de que son unos señores muy honrados y competentes, y que no suelen aceptar sobornos para hacer mal su trabajo. Pero esas cosas ocurren. Hay gente que no es tan honrada y se conocen casos de soborno, incluso en asuntos mucho más serios que este.
Manipulación televisiva: Quizás el reloj no se hubiese detenido. Pero es posible que Santillana lograse que todas las cadenas que retransitían el evento falsificaran las imágenes para hacernos creer a todos (salvo a la mayoría de los que estaban en la misma plaza, claro) que sí lo había hecho. Si, ya. Es jodidamente improbable. Pero sabemos que es tecnicamente posible. Y, a veces, la televisión hace ese tipo de bromas.
Comando de ninjas gallegos: Los ninjas son una especie de espías y asesinos del japón medieval. Que yo tenga constancia, no existen ninjas gallegos. Auqnue si sé que el ninjutsu existe, y que es posible que un gallego, incluso varios de ellos, lo aprendan. Es cierto que sería muy raro. Pero sería posible instruir un grupo de gallegos en artes marciales, vestirlos ninja e infiltrarlos con esas técnicas. Si, ya lo sé. Yo tampoco lo creería.
Poderes mentales: Se puede demostrar la existencia de Las casualidades, lo sabotajes, los sobornos, la manipulación, incluso los ninjas. Todos existen y son comprobables, se pueden demostrar. El único ejemplo de esta lista que no se puede comprobar es este, el de los poderes mentales. Incluso hay personas que han dedicado y dedican su vida a su investigación (con más o menos seriedad). Pero hasta ahora no han podido demostrar nada.
Sí. No queda más remedio que admitir que incluso un comando de ninjas gallegos es más creíble que la existencia de poderes mentales.
De lo que se deduce que tamto Carlos Santillana como yo tenemos que aportar pruebas realmente sólidas antes de que podamos pedir que creas que tenemos (o simplemente que existen) esos misteriosos "poderes mentales"
Hoy es domingo. Y los domingos no hay posts, que son para el asueto.
Y, además, es día uno de enero, así que tampoco hay señorita.
A ver si no voy a poder descansar ni un día...