Las tres fases de la dialéctica son:
Tal día como hoy de 1986, el manchego Victor Andrés Garcia Wimberg descubrió que, en contra de lo que había creído toda su vida, no padecía de insomnio, sino que todas las noches dormía a piernas suelta, soñando que permanecía despierto.
A Victor Andrés Garcia Wimberg siempre le quedó la duda de si se había dado cuenta de ello mientras estaba despierto, o si lo había hecho en sueños.
El primer día, hermanos míos, estábamos juntos los cinco hijos de este relato que es a la vez nuestro padre, nuestro hogar y nuestra creación. Como suele ser habitual, también nos acompañaba la mayoría de nuestros hermanos sin voz, que necesitan de nosotros para poder hablar. Pero eso no iba a durar así demasiado tiempo, porque un cruel ladrón, un asesino, actuaría en nuestro perjuicio durante los cinco días siguientes.
Al amanecer el día posterior nadie (ni vosotros, ni yo, ni los veintidós silenciosos) notó el rapto del primer hermano. Triste es decirlo, pero la desaparición de la primera voz (del primer sonido, digamos) nos pasó completamente desapercibida. El golpe innoble, artero y silencioso se realizó en el salón, ante los ojos de todos. Al principio estaba ahí y, de repente, había desaparecido, ya no estaba entre los presentes y nadie vio como pasó. No es extraño, si él siempre había sido bastante discreto, tan callado a veces (sobre todo, si estaba acompañado por otros de vosotros). Tras ese zarpazo inesperado, ese latrocinio asesino y traidor, el relato perdió la primera voz y (lo peor de todo) casi no lo notamos.
Pero en el tercer sol sí se notó entre nosotros, en el texto incompleto donde en este momento solo vivimos tres sonidos, el horrible silencio de los dos hijos perdidos de entre los presentes. Perdidos, sí, por el triste y horrendo robo de ese envilecido y misterioso enemigo desconocido. Y ese silencio nos hizo prever, escondidos, encogidos de miedo e indefensión (o, mejor dicho, de simple terror y desespero) en el rincón menos visible del dormitorio, el destino siniestro de los tres estremecidos presentes.
Otro sol y otro sibilino robo (y no lo vimos). Somos sólo dos los hijos con voz vivos, con los ojos rojizos y fríos por no dormir y los rostros sombríos y rígidos por no vivir ni morir. Y no oímos otros sonidos sino los sordos gritos dichos con horror por nosotros mismos.
Y otro torvo y horroroso robo, y solo yo con voz. Y solo por hoy...
¿Y?
Joé, se me olvidaba que tenía que poner la respuesta al último reto friki...
Como ya se ha ido viendo en los comentarios, los tipos en cuestión son todos filósofos:
No era tan fácil como parecía ¿Eh?
Personalmente, tuve que andar googleando (Metiendo nombres de "Sospechosos" para encontrar las fotos) para reconocer a Habermas, Foucault, Adorno y Hayek.
Mes: 3.
Día: 14.
Hora: 15.
Minuto: 9.
Segundo: 26.
...
¿3.1415926...?
¡Feliz día de Pi!
Me he dado cuenta de tan señalada fecha por Maese Zifra, que se me ha adelantado porque es más listo, pero que no puede ser tan preciso con los decimales porque no tiene El Script.