Primer artículo del año 2004.
Si, me he retrasado mucho.
Ya está. Ya se ha acabado la dichosa Navidad. He sido un buen ciudadano, y he participado como los demás en la Celebración del Consumo.
En Navidad recordamos que hace mucho tiempo se instauró la tradición de Comprar Compulsivamente Cosas que No Necesitas, la de Comprar Regalos Inútiles, la de Comer Mucho Más de lo que Te Apetece...
Es decir, hacer todo aquello que sirva para gastar mucho dinero.
Es lo que llamamos "Espíritu Navideño": Nos dedicamos con generosidad a mantener en buena marcha la economía.
Hay quién opina que eso de la Navidad es algo religioso o espiritual, y que tiene que ver con el amor o algo de eso. Evidentemente, los que dicen eso deben estar ciegos.
Para aquellos que esto le haya sabido a poco, ahora mismo empieza otra tradición del mismo tipo: Las Rebajas.
Las Rebajas tienen también su espíritu, y este consiste en comprar a un precio rebajado algo que de todos modos no habrias comprado.
Con el fin de la Navidad llega otra tradición: La del sentimiento de culpa por los atracones. Se le conoce como Culpabilidad Dieto-Inducida o Síndrome de "Tengo-que-adelgazar".
Muchas personas, casi todas mujeres, toman repentina consciencia de que (como decía en el primer párrafo) Han Comido Mucho Más de lo que Les Apetecía. Se pasan por la báscula cuando nadie mira, y deciden que deben adelgazar.
Por ejemplo, A. es una encantadora señorita que "ha engordado cuatro kilos". Si A. engordara otros cuatro más, empezaría a acercarse a sus proporciones estéticas ideales.
Pero no. A. ha decidido perder esos cuatro kilos.
A. se quejaba de que no salía en este blog. Pues ya ha salido. No estoy muy seguro de que le guste demasiado el contexto en el que sale, pero no se puede tener todo...
Además, está la tradición de los Propósitos de Año Nuevo. Yo mismo hice un par de ellos el 15 y el 16 del mes pasado.
Este año, parece que el propósito de moda es Dejar de Fumar. Lo que parece llevar como corolario Hacer que Dejen de Fumar los Demás. Lo que puede provocar más de un conflicto, como puede atestiguar el amigo Arkangel.
P.D: Como era de esperar, los Reyes Magos no me trajeron lo que yo quería. Aunque tengo que admitir que este año no he sido demasiado bueno.