Me he gastado un dinero que, en puridad, debería haber dedicado a otros fines, en comprar una cámara digital. Exactamente la misma que ya se compró el Ark, y que tantos problemas le dió.
En los dos días que llevo trasteando con la cámara, me he dedicado a experimentar con ella.
Y, además de diversas pruebas de los más absurdo, he estado intentando cazar a un mirlo.
Concretamente, el pájaro que puedes ver en las fotografías de aquí al lado, es un mirlo común (Turdus merula), facilmente identificable (si las fotos tuvieran algo de calidad) por su pico amarillo y el cerco alrededor del ojo del mismo color.
Se les puede encontrar en los parques de todas las ciudades de la península ibérica y, concretamente en Granada, no escasean.
Es más, los veo todos los días en un pequeño parque que hay entremi casa y el trabajo...
Y, a pesar de todo, en dos días, no he podido hacerle al cabroncete este ni una sola foto decente.
Claro que también es cierto que siempre paso por allí con prisas...
Estaba escribiendo este post, cuando un minúsculo insecto se ha posado en el monitor. Lo que me ha dado una buena oportunidad para probar el modo macro de la camarita...
Primer descubrimiento: Mejor olvidarse del enfoque automático. Hay que hacerlo en manual...
A las Pruebas me remito: Para tratarse de algo de menos de dos milímetros de largo, no está nada mal...
Se trata de una mosca (Orden Diptera). Tras consultar una guía de insectos, probablemente sea alguna especie de Drosophila. Para identificarla con más seguridad debería ver, al menos, las venas de las alas (Y saber identificar lo que veo, claro). Y eso es mucho pedirle a la imagen...
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